Oposiciones al Tribunal de Cuentas
Las oposiciones al Tribunal de Cuentas son unas de las más complicadas en el mundo opositor. Vamos a contarte lo máximo posible sobre este tribunal y cómo debes enfrentarte a este tipo de oposiciones.
¿Qué es el Tribunal de Cuentas?
Cuando se habla del Tribunal de Cuentas, lo hacemos de un órgano que sirve para controlar las cuentas y gestionar todos los gastos públicos. Estamos ante un órgano que ejerce una labor fiscalizadora que podríamos denominar vital para nuestra administración.
Realiza una función indispensable en el plano jurisdiccional, encargándose de enjuiciar la responsabilidad que tienen las personas que se encargan de de utilizar dinero público. Otra de sus funciones es la de controlar a los partidos políticos en sus actividades económicas y en la financiación con la que cuentan.
Estamos ante un Tribunal que es vigilante con los fondos que entran desde asociaciones o fundaciones que tengan relación con partidos que tengan representación en el parlamento español.
Está reconocido por nuestra Constitución y funciona dependiendo de las Cortes Generales. Aunque tiene su razón de ser gracias a la delegación de las Cortes, destaca su independencia a la hora de actuar, puesto que los miembros del Tribunal de Cuentas son independientes y no se les puede remover sin justa causa, además de someterse al mismo régimen de incompatibilidad que cualquier Juez.
Funciones del Tribunal de Cuentas
Su tarea es la de fiscalizar, enjuiciar y ver si el dinero público del estado está siendo gestionado correctamente. Esto quiere decir que el destinatario de ese dinero es el que debería y no hay incumplimiento de la ley.
En cuanto a la organización, da cumplida respuesta a sus dos funciones principales, con secciones que se encargan de fiscalizar y enjuiciar en una estructura departamental para el mejor cumplimiento de su labor.
Además de la tarea del Tribunal de Cuentas, en nuestro país existen más órganos de control externo de las administraciones autonómicas y locales, pero la tarea del enjuiciamiento en el plano contable, si que pertenece en exclusividad al Tribunal de Cuentas.
Sede electrónica del tribunal de cuentas
El Tribunal de Cuentas, como el resto de la administración se ha adaptado a los nuevos tiempos que corren, donde Internet es fundamental para su labor. Contar con su propia sede electrónica hace que los ciudadanos puedan comunicarse con dicho tribunal y permite que pueda realizar sus funciones de una manera más moderniza y eficaz.
Formas de contactar
El Registro General tiene dos direcciones:
- C/ José Ortega y Gasset nº 100 en Madrid con horario de 9 a 14 horas de Lunes a Viernes. Teléfono: 91 447 87 01
- C/ Padre Damián nº 19 en Madrid, con horario de 9 a 14 horas de Lunes a Viernes. Teléfono: 91 447 87 01
Enlace con la Sede Electrónica.
Quienes integran el tribunal de cuentas
En el caso de este Tribunal, los Consejeros de Cuentas se nombran:
- Seis por el Congreso de los Diputados
- Seis por el Senado
En ambos casos se vota por mayoría de tres quintos en cada cámara y por un periodo de 9 años. En el caso del Presidente lo nombran de entre sus miembros por el Rey, proponiéndolo el Tribunal de Cuentas en Pleno y ejerce su cargo durante tres años.
Oposiciones al tribunal de cuentas
Las últimas oposiciones convocadas pertenecen a la convocatoria del 2016. A la espera de que aparezca una nueva convocatoria, si que queremos dejarte claro que es una oposición bastante dura donde salen pocas plazas y los opositores se preparan duramente.
Vamos a darte una serie de consejos por si tienes planteado presentarte y que también te valdrán para el resto de oposiciones de Justicia o de otras oposiciones que quieras presentarte:
Lo primero que tienes que tener claro es que antes de ponernos a hincar los codos hay que tener bien seguro que oposición hemos decidido estudiar, ya que estamos ante un tipo de estudio que no requiere únicamente aprobar, demanda conseguir una buena nota para alcanzar el objetivo marcado que no es otro que la consecución de la deseada plaza.
Las oposiciones no son gratis y cuanto más alto es el cargo al que aspiramos, las pruebas son más duras y exigentes, aunque a cambio contamos con menos rivales. Pongamos un ejemplo, no es lo mismo prepararse las oposiciones, siendo abogado o ingeniero, para auxiliar administrativo donde hay 800 plazas y 27.000 aspirantes que hacerlo al Tribunal, donde puede haber 5 plazas y 1.500 solicitudes.
Si quieres tener éxito, en un tipo de oposiciones de nivel elevado como las del Tribunal de Cuentas, hay que buscar un preparador, que te dará el temario que debes estudiar y esos trucos que por experiencia propia sabe que son infalibles para afrontar con éxito una carrera de larga distancia como es una oposición de este calibre.
Un tema importante a la hora del estudio es hacerlo en un lugar acondicionado. Siempre que puedas, estudia en tu propio cuarto, no te olvides de tenerlo todo bien organizado y planificado. Fundamental también es estar motivado, pues en la oposición no todos los días son iguales y en unos más que en otros vas a ver cómo muchos días vas a rendir de forma diferente que en otros.
Aún con los entendibles picos de rendimiento, no debes alejar tu mirada del objetivo, la consecución de la plaza y esto no se consigue sin el correspondiente sacrificio. en una oposición luchamos contra nuestros rivales, pero también contra nosotros mismos.
Opositar hay que tomárselo como un empleo
Las oposiciones al tribunal de cuentas tenemos que considerarlas un empleo y como cualquier profesional, si estás dedicado a ellas por completo, también vas a necesitar tus horas de expansión. Todos tenemos un tope de horas que si lo sobrepasamos nuestro rendimiento merma. Con el paso de los días vas a ver tu tope de horas. Recuerda siempre que más horas no es mejor estudio.
Lo mejor es empezar la preparación de las oposiciones a media jornada. Estudiar del orden de cuatro horas es un tiempo asequible para todo el mundo y podrás realizar algún descanso. De esta manera tu mente y tu cuerpo se irá adaptando al ritmo de estudio, que irá aumentando progresivamente.
Seguro que piensas que es demasiado poco si lo comparas con lo que dicen que le dedican otros estudiantes, pero de la misma forma que uno no pueda comenzar a correr en su primer día 10 kilómetros, tú tampoco puedes comenzar estudiando 8 horas. Los corredores no quieren lesionarse y tu tampoco quieres que se te quiten las ganas de estudiar ¿no?
Cuando llevemos tres meses, podemos ampliar nuestro tiempo de estudio, el mes cuarto a cinco horas diarias y el quinto a seis. Al séptimo mes ya estarás estudiando tus ocho horas como muchos opositores. Ya llevas el ritmo de "crucero", pero solo de lunes a viernes.
Los fines de semana quedarán para cuando vayan aproximándose las fechas cercanas a los exámenes de la oposición.
Si ves que estudiar el sábado no te satura, eres libre para hacerlo. En el caso de los que trabajan, esto es diferente y claro que tienen que estudiar en muchos casos los fines de semana, pues es cuando más tiempo libre en teoría se tiene.
Marca en tu calendario las horas de estudio de cada tema. Al igual que plantéate el realizar simulacros de examen cada mes. Seguro que el preparador tiene para ti exámenes o test en base a las últimas convocatorias de examen, por lo que son una buena piedra de toque. De especial utilidad son los test de cada tema, puesto que ayudan a que asimiles la temática y tú mismo veas como poco a poco vas derribando las barreras y los errores cada vez son menores.
Seamos flexibles al estudiar para el Tribunal de Cuentas
Cuando nos organizamos en la oposición, no hay que ponerse corsés que no podamos seguir. Hay que ser realista, lo que equivale a tener flexibilidad. De nada vale que pongamos un ritmo que no vamos a poder seguir, puesto que esto va a conducir a que nos frustremos. No está de más darnos algún premio cada vez que acabemos un tema, por ejemplo.
Pasarse de horas o estudiar sin la debida concentración es del todo inútil. La consecuencia de esto es olvidar todo lo que hayamos estudiado. Por lo tanto, estudiar bien y realizar unos repasos equilibrados harán que la materia de estudio se sedimente como es debido.
El tiempo que debemos dedicar al repaso, tiene que aumentar de forma progresiva, puesto que según se acerque la fecha, cada vez nos van a quedar menos temas nuevas para estudiarlos, pero con más temas que vamos a tener que repasar.
¿Cómo estudiar?
El hecho de prepararnos para el estudio y ponerlo en marcha es algo que suele ser objeto de muchos debates. Normalmente se suelen seguir pasos parecidos, pero adaptándose a cada persona en particular. Os damos una serie de puntos que pueden ser interesantes para que estudiéis más y mejor.
Lectura: contamos con la totalidad del temario en nuestras manos. Lo primero que hay que hacer es sentarnos y leer de forma reposada. Aquí nos sentimos ilusionados y vamos leyendo el contenido. Sin más presiones que ir sabiendo de que se trata y entendiendo de que se nos habla.
Subrayar: en este punto, señalamos lo que es más importante. Se hace una vez se ha asimilado lo que leemos y nos ayudará a que se vayan fijando las ideas.
Resumir: aquí ya realmente tenemos que hacer un esfuerzo, puesto que debemos quitar toda la paja y quedarnos con lo que es realmente útil para nuestro estudio. Esto en el caso de los textos legales a veces será complicado, pues la literalidad de las leyes debe ser respetada.
Realización de esquemas: son también muy importantes y refuerzan todo lo que hemos estudiado, colaborando en la tarea para que podamos recordar las ideas más importantes y las palabras realmente importantes fácilmente.
Memorizar: aquí hay que ser realistas, es la fase más complicada y dura. Muchas veces cuando uno se encuentra con tantas leyes y una temario tan amplio puede pensar que no va a conseguir aprenderlo, pero todo lleva su tiempo. Si otros consiguieron hacerlo y ahora cuentan con su plaza en el Tribunal de Cuentas o en otros órganos tú también puedes conseguirlo.
Pueden ser de gran ayuda los libros que existen con técnicas de tipo nemotécnico. Seamos conscientes de que no todas valen para todo el mundo. Aquí tu tarea consiste en examinar y optar por las que más se puedan adaptar a ti y las que veas, en definitiva, que pueden ser de mayor utilidad para la asimilación del temario.
Repasar: esta es la parte final y hay que tener en mente que cada tema que repasamos estaremos más cerca del objetivo. Si lo llevas todo bien, esta última parte es donde vas a ver como cada nuevo repaso tienes más controlados los temas. Los repasos en los últimos días son duros, pero no debes olvidar que cada día que pasa es uno que restas para llegar al día del examen. Tu plaza te espera.
Seguro que después de todos estos consejos, algunos que ya sabíás y quizás otros nuevos, ya estás más preparado para afrontar la preparación de las oposiciones para el Tribunal de Cuentas o de otras oposiciones de Justicia o de otros sectores en caso de que lo valores. Existen muchos opositores que estudian las oposiciones que desean aunque no se cuando se van a convocar.
Cada persona es un mundo y sus circunstancias, pero de no ver claro una fecha con cierta seguridad, no es mala opción pensar en presentarse a otras con las que puedan compartirse partes del temario. La constitución española y algunas materias legales y administrativas suelen ser comunes en los temarios de nuestro país.
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